El Hombre que sabe soñar ha de ser señor, pues de toda tierra tendrá control bajo los mares de su alma y sabido es que quien domina su alma controla el universo, ya que lo que sus sentidos captan, de eso vive su cuerpo y se alimenta su espíritu.
Soñadores son aquellos que se desligan de esta verdad temporal, quienes pueden ver mas allá de sus ojos, quienes construyen castillos en el aire y los materializan en la tierra, soñadores somos quienes todo sacrificamos por imágenes esperadas, quienes moriremos por nuestros bocetos y quienes sabemos que las posibilidades de que se cumpla nuestro plan es ínfimo y aun conociendo ello perdemos lo masivo de nuestra existencia por esa diminuta probabilidad.
Paradojicamente, nadie duerme tan poco como un soñador, pues no puede hallar el descanso de su corazón hasta no ver reflejada su realidad en la vida que le ha asignado el destino.
Despierto en el tiempo que descansa los soñadores buscan por el terreno de ese universo alterno a su promesa.
Al cerrar mis ojos caigo en la verdadera materialidad de mi utopía mental, donde soy el mas pequeño, y a la vez el único creador supremo,casi el ser mas divino y puro. Dirigir con Firmeza el orden de mis sueños muchas veces fue un labor cruel, el veneno que hacia morir mis deseos tambien lo hacia conmigo, solo que mas lentamente....matar un sueño es como perder una parte de nuestra vida, crear un sueño se compara a nacer de nuevo, yo ya he muerto y nacido mucha veces.
Comparo a los sueños como mariposas, llevan tiempo con una forma primaria, luego se alimentan de su entorno, durante largos periodos descanzan inertes sin movimiento, luego se transforman y alcanzan vuelo desplegado su hermosa figura, y luego de un día mueren, tras dejar miles de futuros sueños, que aun no se gestan.
En mi interior puedo observar en todo reposo nocturno, un campo de mariposas las cuales despliegan su vuelo al acercarme, intento tomar algunas de ellas y no lo logro, luego despierto y espero hasta mi nueva oportunidad de hacerlo, así sigue el siclo del soñador durante toda su vida, en algún momento atrapas una ilusión y eres feliz y nadie puede quitarte esa alegría, aunque en mis tontos afanes puedo perderlas por abrir mi mano demasiado pronto.
Valla arquitecto que hemos sido, construyendo un futuro lleno de rosas, y alegrías. Vaya tontos que creíamos que no existirían espinas y tristezas, y que grandes sabios que fuimos al levantarnos de nuevo y crear nuevos cimientos sobre los viejos deseos y amar.
¿Acaso puede olvidar lo aprendido un hombre? No lo creo realmente, pues si se olvida, no puede afirmarse que se aprendió, pues el aprendizaje, depende demasiado de la cordura y de la esperanza, de la conciencia y de la determinación, no de exámenes y juegos de palabras.
Soñador, he dejado la Razón por mi Pretensión, y apasionado en su ejecución (aunque sea tardia) deje de lado lo deductivo por las locuras de mi sentir
acostumbrado ya a escuchar tu vos irrumpiendo en mi mente....sueño te he de llamar y sin dudas de que no necesito comprender, pues la información no deja nada profundo si la pasión no la acompaña.
No soy maestro de imágenes de letargo, ni director de obras psicológicas soy un simple soñador que busca alcanzar su meta, y los inicios requisitos son nunca bajar mis brazos, jamas evaluar la posibilidad de la derrota, y ser guiado por mis pies, siguiendo el diseño de mi sensato dibujo, y no los caminos que voces ajenas han de asfaltar de ideas sus especulaciones.
Por ultimo, ningún soñador distingue entre sueño y realidad, pues ambas son lo mismo, la fantasía es nuestra brújula y lo irreal es la ley....se que no llegaran a comprender...al menos decídete a volar pequeña mariposa...
"el aleteo de una mariposa en Londres puede desatar una tormenta en Hong Kong". (teoría del caos)
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