viernes, 13 de enero de 2012

Decisión

Alarmado camina el hombre que dice llamarse virtuoso, observando en detalle cada rincón de su conciencia y comprende así que el tiempo de definir que camino seguir ha llegado, mas prematuramente de lo que el esperaba. Pero así es la realidad, la única verdad del tiempo es que es una gran mentira. Nadie lo contiene pues es "inútil intentarlo". Algunos valerosos han pensado que pueden manejar su curso, y desperdiciaron su vida intentándolo, han muerto por esta causa perdida. Cuando las tormentas del cambio arremeten contra las estructuras de la fría imposición humana de la distinción ente correcto e incorrecto, no existe fuerza capas de resistirla, por mas abundante que fuera dicha barrera de restricción. Comprendiendo que nada se puede hacer, el sujeto opta por sumergirse en lo que le espera, sin dudar ni un segundo de las posibilidades. Nadie sabe que le ha de deparar, y de todos, es el que mas lo ignora, pero por mas pronósticos que sugiera su cordura, solo ganara lo absurdo e imprevisto. El cambiar la realidad nunca fue una tarea fácil, requiere movimientos rigurosos y la exposición a peligros inminentes, a sacrificios enormes y a inimaginables perdidas, pero sabido es que no hay ganancia en el sedentarismo. El caminante aprendió por experiencias pasadas, que por mas duro que sean sus martirios, debe continuar con el espectáculo, declinar solo trae problemas, y problemas ya le sobran. El día de mañana se reflejara en su rostro un desenlace, y en su vejes redactara una historia. Historia que puede hablar de una victoria, o de un rotundo fracaso, creo que hasta me atrevería apostar que quizás refleje solamente muerte, pero que mas da. Conozco muy bien a este hombre, pues somos prácticamente el mismo ser, solo que yo lo observo desde un anglo diferente y el aprecia en primera persona. Hasta el momento todo es incierto, y lo que pudiéramos imaginar pueden que sean puras incongruencias, desde este momento estamos intercambiando vida por futuro...y mas allá de un sueño de una subsistencia claramente dichosa, nos conformamos con una muerte honorable....



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