sábado, 28 de julio de 2012

Erase una vez un cielo estrellado


Entre tantas cosas que aparecen de la nada, entre tantas historias sin sentido, entre descabelladas ideas, esta no debía ser menos. No busque una razón, no era necesario preguntarse ¿por que?, la verdad es que la vida es la fantasía de cada instante y sin interrogantes aprendemos de ella.  Mientras muchos creen que cuestionar es el camino al perfeccionamiento, yo creo que si nos dejáramos de cuestionar y solo buscáramos entender el mensaje antes del motivo, seriamos mas perfectos pues no filtraríamos criterios,definiciones ni razonamiento alguno, seria como respirar, aun sin entender como funciona lo hacemos...solo es mi punto de vista y tengo el beneficio de la duda. Miraba al cielo y pensaba en el labor de las estrellas, ese de iluminar pequeños sectores oscuros, y comprendí así que luz y oscuridad no son diferentes pues dependen entre si. Sin luz que que disipe a la oscuridad esta no seria llamada así, y sin oscuridad que disipar, la luz no tiene utilidad, comprendí entonces que si algo debía hacer, era buscar la luz que algún día perdí pues como todos sabemos un entorno oscuro es esta sociedad, había escuchado de algún lugar en el mundo de los sueños, una torre o castillo irreal, al que solo llegan los tercos, el sitio interno donde guardan las los brillos perdidos... cerré mis ojos y me lance a soñar.
En la fulgente torre de la estrella, se  guardan las palabras suspensivas, protegidas del celoso dios del oído, aquel que solo busca enterarse de todo lo creado, irrumpiendo en el mundo de las alegrías soñadas con su guadaña de despertares realistas, un monstruo lógico que destruye lo que no puede conocer a causa de su ceguera innata, inquisidor y torturador, por fortuna alejado de nosotros. Es en ese lugar donde los taciturnos vocablos yacen inertes en la calma de la expectación disfrutando de la  paz que crea el cálido abrazo mudo, preservan  su perfección con la duda y crecen dichosos y fuertes aguardando que algún día colapsen los temores para ser verdaderamente libres .  En aquella torre las guardianas celosas conectan su realidad con la nuestra, convirtiendo su ser en el lecho donde reposan las hijas del lenguaje en forma de imágenes mentales, asi es como cada noche sin siquiera prevenirlo, despertamos aun dormidos en quien sabe donde.
 Disfrazados con mascaras vitreas y ropas agraciadas, anónimos o de rostro invisibles ven la luz los ventanales angelicales en lo alto de la torre, hacen  de los ideales ocultos un espectáculo publico al que irónicamente solo asisten los mas nobles . Desde un pequeño pensamiento originario del alma amante, uno de los pocos sobrevivientes al caos vivido a lo largo del tiempo ,es el traductor que comprende sin conocer nada y a las mas grandes incógnitas  descubre sin poder siquiera  llegar a verlas. Junto a el las hadas del cántico revolotean mientras revelan su don musical , tejiendo en el aire signos secretos a cada nota, así es como las letras enredadas se pierden en la memoria de un receptor y a la vez se esconden en el recuerdo de un anónimo poeta. Este es el funcionamiento de esta democrática monarquía de reyes y princesas de algún soberano espejismo, que corretean por pasillos transparentes rebosantes aunque parecen vacíos.
 He encontrado también en la torre, tal vez como simiente o corazón de la misma,  una pequeña flor bondadosa, que a pesar de vivir alli todos estos años, aun se encuentra perdida, frente a ella siempre hay una multitud de ojos tercos que al no visualizar su verdadera belleza, siguen el camino del necio y la juzgan, pero sin importarle la voz de los externos la pequeña crece cada vez con mas fuerza. Sus lagrimas regaron en el pasado su cuerpo dando así origen a sus espinas y con sus espinas luego de un tiempo forjo una pluma, con ella escribe sobre sus verdes hojas, hojas que se  han vuelto su diario y cuenta en cada nervadura como si fueran reglones, la historia de la torre que aunque le es por demás ajena, dice  amar con toda su alma. A medida que avanzo en la lectura, llego a creer  que sus narraciones tienen el poder de hacer comprender la verdad de todo hasta al mas obstinado de los hombres, curiosamente lo digo porque ese titulo me es el mas propio y  pesar de no adquirir en ninguna otra parte de la torre la luz de mi alma, me quedare aquí junto a la luz de mi guía eterna y oculta, una pequeña flor, corazón o simiente..finalmente tal vez no es la luz que arrebatan mis manos para iluminar a los oscuros seres sensatos, sino que sera aquella luz la que destruya alguna oscuridad en mi corazón.
En ambos sentidos, siendo luz que alumbra o oscuridad que perece el ciclo se cumple, en ambos aspectos mi propósito se cumple.


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